viernes, 9 de agosto de 2013

La Escalera Inamovible

En la Iglesia del Santo Sepulcro, en Jerusalén, existe una pequeña escalera de madera conocida como la Escalera Inamovible. Se le llama así pues ha estado en el mismo lugar -apoyada en el exterior de una ventana del segundo nivel- desde, cuando menos, inicios del Siglo XVIII, apareciendo en un sinnúmero de pinturas, bosquejos y fotos a lo largo de los siglos, sin que nadie se percatara de ello hasta inicios del Siglo XIX. 

En 1853, la Santa Sede gestionó el acuerdo ecuménico conocido como el Status Quo, el cual otorgaba la custodia de la Iglesia del Santo Sepulcro a seis ordenes ecuménicas de seis respectivas iglesias: Católica, Griega Ortodoxa, Armenia Apostólica, Copta, Etíope Ortodoxa y Siria Ortodoxa. Ocurrió, sin embargo, que en el Status Quo se estipuló que todas las ventanas, anaqueles, alfeizares y salientes del complejo serían designadas como "áreas comunes", las que solo podrían ser modificadas con el expreso consentimiento de las seis ordenes ecuménicas. De esta forma, la escalera quedó en un limbo, pues si bien técnicamente no es parte de la propiedad común, se encuentra apoyada en una ventana y una saliente, por lo que nadie puede alterarla. 

Más aun, en 1964, el Papa Pablo VI emitió una orden pontificia que prohibió expresamente cualquier alteración a la escalera, que solo podrá ser movida el día en que se declare finalizado el Gran Cisma de la Iglesia Universal, que dividió a las iglesias Católica y Ortodoxa en el año 1.054.